CÓMO SE DESARROLLÓ PORAMÉRICA

PorAmérica, el programa de fortalecimiento de organizaciones de base y estímulo a la generación de ingresos impulsado por RedEAmérica, con la importante participación financiera del Banco Interamericano de Desarrollo, BID, a través de su Fondo Multilateral de Inversiones – FOMIN, culmina sus operaciones en 2015 con logros muy alentadores. Conozca cómo fue el desarrollo del programa en sus seis años de trabajo.

Línea de tiempo

PORAMÉRICA BUSCA LA SOSTENIBILIDAD DE LAS INICIATIVAS

Buenas prácticas de gestión

En 2012 se comenzó a trabajar en el diseño de la estrategia de formación en Buenas Prácticas de Gestión la cual por sugerencia de la Unidad Ejecutora se enfocó en lo comercial y se focalizó, la cual se ofreció en las ODB de los 70 proyectos apoyados y no a 750 ODB de los 6 países como estaba en el marco lógico del proyecto, para buscar un impacto mucho mayor en los aprendizajes. Se decidió que esa formación se centraría en lo comercial para fortalecer una debilidad manifiesta de las organizaciones y se contrató a un experto con amplia experiencia de trabajo con organizaciones apoyando ese tipo de iniciativas.

El experto adelanto durante diez meses una consultorio a todas las ODB con proyectos en el programa. Se hicieron talleres con las organizaciones de base y las entidades acompañantes de cada país para transferirles la metodología que les permitiera acompañar las organizaciones y usarla también en otros proyectos y talleres con organizaciones de base fuera del marco de PorAmérica, para entrenarlas en buenas prácticas de gestión comercial.

“A partir de esta estrategia, logramos tener un diagnóstico empresarial por cada una de las ODB, a través de una herramienta sencilla, que se les entregó a las EA y ODB, permitiéndoles aplicarla, apreciar los avances y analizar las fortalezas y debilidades de las organizaciones en este tema. Al final de la consultoría, cada organización contaba con un portafolio de servicios, un plan comercial y un plan de acción de ese plan comercial proyectado a uno y tres años por cada una de las ODB”, comentó Pilar Hernández.

En total se capacitaron en buenas prácticas de gestión 123 organizaciones de seis países.

También en 2012 se hizo una ampliación de la segunda convocatoria del programa con el fin de darle oportunidad a otras ODB de presentar proyectos y así acercarse a la meta prevista de los 80 proyectos. En dicha ampliación se presentaron 7 iniciativas y todas fueron aprobadas, con lo que se lograron, 143 organizaciones apoyadas por PorAmérica a través de 70 iniciativas.

La evaluación intermedia

Hacia agosto de 2012 se comenzaría a trabajar en los términos de referencia para contratar la evaluación intermedia del programa prevista en el diseño. La evaluación fue contratada en octubre de ese año con SNV, una conocida organización holandesa de cooperación al desarrollo, cuyo foco es la erradicación de la pobreza, con presencia en 39 países de América, Asia, África y Europa y que tenía experiencia de trabajo en iniciativas apoyadas por el BID-FOMIN y presencia en la mayoría de los países donde operaba el Programa.

Según el informe final de la misma “el BID FOMIN propició la realización de una evaluación intermedia del mismo, en la que se estudiaran aspectos relacionados con el cumplimiento de los indicadores, pero también con percepciones, impresiones, lecciones aprendidas y, en general, conclusiones y recomendaciones de cara al futuro, con la finalidad de generar suficiente información que oriente la toma de decisiones." .

La evaluación concluyó que “Los proyectos lograron resultados importantes con respecto al fortalecimiento organizacional de las ODBs (sic) y demostraron mayor eficacia en este aspecto. Se puede visualizar resultados concretos en mejoras de organización administrativa y financiera, resolución de conflictos y la habilidad para identificar sus propias necesidades. Estos factores van a contribuir a la sostenibilidad tanto de los proyectos como de las ODB en sí ”.

Sin embargo, también se anota allí que el aspecto de generación de ingresos, ha sido menos eficaz y lo atribuye a factores como proyectos con poco tiempo de inicio, enfoque de algunos proyectos hacia el fortalecimiento organizacional, demasiado poco tiempo dado a la actividad productiva por la alta demanda de tiempo para las cuestiones administrativas de la gestión del proyecto y la falta de vínculos directos con el mercado al no diseñar la actividad productiva con base a una oportunidad comercial existente.

Cabe anotar sin embargo que para el momento de hacer la evaluación intermedia, muchos de los proyectos de la II Convocatoria estaban hasta ahora comenzando o llevaban muy poco tiempo, por lo cual tampoco era factible encontrar muy buenos resultados en términos de ingresos.

Con respeto a la eficiencia de los proyectos, el informe anota que existe, en general, una buena coordinación y colaboración continúa entre las entidades acompañantes y las organizaciones de base y una buena comunicación entre PorAmérica y las primeras, la cual ha contribuido a la eficiencia del manejo de los proyectos.

También anota que “PorAmérica logró dinamizar cierto nivel de intercambio y sistematización de experiencias entre los distintos países y la sede en Colombia, pero, teniendo en cuenta que el presupuesto del programa no lo preveía, no ha podido aprovechar completamente el potencial que ofrece un programa regional para el intercambio y aprendizajes entre los países y los mismos participantes del Programa.

La eficacia del Programa en este sentido ha sido limitada por varias razones incluyendo: la dificultad de operar un programa regional desde una sede en un solo país y sin presencia en los demás países (y con personal solo a tiempo parcial en los países) y sin posibilidad para viajar” lo que dificultó la falta de encuentros entre los participantes de los diferentes países.

Los resultados de esta evaluación alimentaron la reflexión al interior del Programa y condujeron plantear un Plan de Sostenibilidad en la solicitud de prórroga presentada al BID FOMIN en junio de 2013. Con esta prórroga se buscaba terminar todos los proyectos y completar las actividades de sistematización y comunicación de resultados. El Plan de Sostenibilidad, por su parte, estaba dirigido a atender aquellas necesidades, identificadas por los actores del programa en la evaluación intermedia-, y orientadas a fortalecer componentes como el de comercialización, transferencia de conocimiento y comunicación, permitieran elevar la sostenibilidad de sus aprendizajes más allá de la fecha de cierre del programa.

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